1- Aplica un pepino en rodajas delgadas en la parte superior de cada ojo durante 15 a 20 minutos, dos veces al día.
2- Mezcla aceite de almendras y miel y aplícalo en las bolsas antes de acostarte.
3- Bebe al menos 2 litros de agua al día.
4- Pon bolsas de té frío en cada ojo durante 10 a 15 minutos evitas esas dichosas ojeras.
5- Haz una pasta de hojas de menta fresca y unas gotas de zumo de limón en ella y aplícalo con un suave masaje dejando actuar 10 a 15 minutos.
6- Aplica dos o tres gotas de agua de rosas en una bola de algodón y masajea suavemente sobre la zona afectada durante cinco o seis minutos.
7- Lavar una patata mediana, quitar la cáscara y cortar un par de rodajas muy finas del tamaño de los ojos. Colocar sobre cada párpado cerrado y mantenerla en esta posición durante diez minutos.
8- Introducir en el congelador dos cucharitas y cuando estén bien frías, poner sobre los párpados cerrados. Mover, en todas las direcciones, los ojos, sin abrir los párpados y dejar puesto 3 minutos.
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